15.6.09

Día 8-2-2007 (Martes):

Después de lo que me ha pasado hoy, creedme, ojalá nunca hubiera aparecido ese extraño director. Me he dado cuenta de que no soy tan fuerte como me pensaba, me parecía que seria capaz de irme de casa sin dejar caer una sola lagrima.
Esta mañana hemos llegado muy temprano al instituto, todo el mundo ya sabía lo del cambio de colegio.
Para nuestra sorpresa, a última hora de clases, la profesora de lengua ha substituido la clase por una despedida muy emotiva. Todos nos han deseado suerte, nos han firmado dedicatorias y esas cosas, hasta Nina, la niña más “Cool” de clase.
Nuestros amigos del grupo nos han retenido unas horas más. Hemos hablado de un montón de cosas y me he percatado de que tendríamos que habernos ido antes porque cuánto más transcurría el tiempo, más difícil se me hacia irme de allí.
Finalmente tras algunos de nuestros lloros y de las amigas, nos hemos despedido.
En casa tanto Dream como yo estábamos muy nerviosas, ella no dejaba de abrir la maleta de viaje para comprobar una y otra vez que todo estuviera en su sitio.
Yo, en cambio, intentaba imaginarme como seria la nueva escuela: los alumnos, los profesores, las habitaciones… Solo espero que a mi hermana y a mi no nos separen.
Mamá ha venido a darnos la charla:

- ¿Lo teneis todo listo, niñas?
- Si mama.
- Ya sabeis que mañana no os dará tiempo de hacer nada, desallunaremos y vuestro padre y yo os llevaremos al nuevo colegio.
- De acuerdo mamá.
- Os hecharemos de menos, esta casa no será igual sin vosotras, se nos van nuestras alegiras...
- ¡Mamá no llores!
- No, Dream, no estoy llorando cielo.
- Estaremos bien, te lo prometemos.
- Gracias Sweet reina... Y ahora a dormir que mañana os espera un dia movido.
- Buenas noches mamá, te queremos.
- Buenas noches niñas, dulces sueños.

La última oportunidad para renunciar ya habia pasado, ya no nos podiamos hechar atrás, lo tenemos muy claro, mañana nos vamos, mañana a primera hora...